¿Cómo algo tan bonito como una relación de pareja puede llegar a convertirse en odio y rencor? Nuestra percepción sobre la pareja no cambia de un día para otro, esto sucede desde el primer momento en que comienza la relación y se va perpetuando poco a poco sin darnos cuenta.
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El arte de cargarse una relación de pareja
Al principio de la relación aparece el cortejo, donde nos mostramos de una manera poco sincera y nada espontánea y, a medida que la relación crece, vamos siendo más espontáneos y las diferencias que antes nos parecían adecuadas, pasables o tal vez puntos a favor, pasan a ser el origen del problema, ya que las dejamos pasar pensando que se acabarán solucionando o que seremos capaces de cambiarlas o incluso no contamos con las habilidades suficientes para detectar esas diferencias. Por lo tanto, aquello que al principio no se veía como algo peligroso pasó a acabar siendo insoportable en vez de producir habituación. Aquí es donde nacen las incompatibilidades y aparece el conflicto. Estas dan lugar a condicionamientos donde la pareja se asocia con aspectos emocionales negativos o situaciones desagradables.
Por amor hacemos cosas que no nos gustan, estas se vuelven habituales y acabamos desarrollando aversión por la pareja. En estos casos no es de extrañar que los miembros de la pareja asocien estos estímulos aversivos a los contextos que se suponen implican descanso y desconexión dando lugar a la búsqueda de estímulos positivos fuera de estas asociaciones, apareciendo así el consumo de sustancias o infidelidades.
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Cómo recuperar una relación de pareja
¿Pero cuál es la solución a estos problemas? Desde los años setenta se han tratado de resolver mediante la psicología clínica y de la salud pasando desde los principios del condicionamiento operante por Richard Stuart hasta la intervención basada en el aprendizaje social de Liberman y Bandura, sirviéndose del modelado y del ensayo, tratando de corregir los patrones de comunicación inadaptados incluyendo también el reforzamiento mutuo. Pero fueron Jacobson y Margolin los que más éxito tuvieron en la terapia marital y aún son utilizados sus manuales en la actualidad. Donde el objetivo de la terapia era el de recuperar la satisfacción en la vida en pareja y los elementos fundamentales a tratar eran el intercambio conductual, la comunicación y la solución de problemas.
Nada más lejos de la realidad, las incompatibilidades de pareja se pueden manejar de muchas formas diferentes pero, desde luego, si las aparcamos y solo pensamos en deshacernos de ellas, daremos lugar a un conflicto en el futuro mientras que si las aceptamos y las abrazamos la convivencia será posible.
Por Pablo Pont Loriente