¿Cómo se sentirán los jugadores de un equipo de fútbol a los que les han marcado 271 goles en contra y solo han conseguido marcar uno a favor? En este minidocumental sobre valores en el deporte, los propios protagonistas de l´equip petit nos lo cuentan.
L´équip petit es un documental que muestra la historia de un club infantil, Margatània F.C, situado en la localidad de Vilanova i la Geltrú, en Barcelona. En él un grupo de niños y niñas de 5 y 6 años cuentan como está siendo la temporada en la que no han conseguido marcar ni un gol a los contrarios.
¿Qué hace fuerte a este equipo?
Sus ganas de jugar y pasárselo bien y sobre todo que tienen claro su objetivo: marcar un gol en la temporada.
Por ello, teniendo esto siempre presente, salen cada partido con ganas de pasárselo bien y de luchar por conseguirlo, cosa que logran a final de temporada.
Son un claro ejemplo de resiliencia, ya que consiguen reponerse después de cada derrota, saliendo con motivación e ilusión y no dejándose llevar por los resultados obtenidos.
Los padres por su parte, apoyan a sus hijos en cada partido y ven tanto los fallos del equipo como las mejorías que han ido haciendo a lo largo del año, dando mucha importancia a los avances que se producen.
Como padres, podemos ir enseñándoles desde pequeños a encajar las derrotas y ayudarles a manejar la frustración que pueden tener cuando no se cumplen sus expectativas.
Valores en el deporte: L´equip petit
¿Cómo podemos hacerlo?
- Como adultos, tener una actitud positiva a la hora de enfrentarnos a una situación adversa es el mejor ejemplo para que aprendan a solucionar los problemas.
- Enseñarles que hay que esforzarse para conseguir las cosas, aunque éstas lleven más tiempo.
- Marcarles objetivos que sean realistas y razonables para su edad.
- Convertir los enfados en aprendizajes, de esta forma, podrán aprender cosas nuevas y la próxima vez sabrán cómo enfrentarse al mismo problema.
También es importante ayudarles a mantener la ilusión y apoyarles en todo momento, para así favorecer su autoestima y sus ganas de seguir jugando.
Por Marta Muñoz, colaboradora de la UPAD.