La sociedad trata de imponernos un camino que debemos seguir de la manera más recta posible y desde que nacemos. ¿Recordáis la famosa frase que todos tenemos que aprender cuando somos pequeños sobre los mamíferos? Nacen, crecen, se reproducen y mueren. En el ser humano es parecida pero un poco diferente. Sería algo así como: Nacen, crecen, estudian, trabajan y mueren. Por supuesto tienes que crecer bien y guapo y listo, tienes que estudiar sacando las mejores notas, y tienes que conseguir un trabajo considerado y con status, y tienes que morirte habiendo sido alguien en la vida.
Muchas veces las personas no se pueden escapar de esa línea recta dibujada por la sociedad, ya que te arriesgas a ser juzgado negativamente por ella.
Desde mi opinión y mis vivencias, mujer, 26 años, graduada en Psicología, actualmente cursando Máster en Terapias Psicológicas de Tercera Generación, os vengo a decir que en ninguno de mis años de carrera o de estudios he aprendido tanto como en los dos años siguientes a la carrera y anteriores al Máster. ¿Qué hice? Salirme un poquito de la línea. Tomarme un respiro de mis estudios durante un tiempo y centrarme en otras cosas. Cosas importantes. Me fui a vivir a Londres sin ningún plan fijo. Esos dos años fueron una vorágine de experiencias y sensaciones. De momentos geniales y momentos horribles, y os puedo asegurar que lo que hice esos dos años en Londres fue cursar un auténtico Máster de la vida.
Lo que intento transmitir es una idea simple y aleatoria. Una muy buena forma de cultivar la motivación, realizar actividades nuevas, aprender de libros, de vivencias y de experiencias. Encontrarás hobbies que nunca te esperarías, aprenderás idiomas y todo ello te ayudará a desarrollarte profesionalmente y a formarte.
¿De que sirve hacer una carrera que no te gusta? Busca información de otros cursos o carreras y cámbiate. Todos podemos equivocarnos en las elecciones, pero siempre podemos cambiar el recorrido.
¿De que sirve un trabajo con status y bien considerado por el vecino si a ti no te llena? Busca algo que te motive siempre. La vida es finita. Si tenemos que pasarnos media vida estudiando y trabajando… estaría genial que fuera en algo que nos motivara de verdad. Esta claro que esto es un lujo y no está al alcance de todos. Pero si tienes esa oportunidad, trabaja en algo que te guste, que te llene. Si no puedes permitirte elegir trabajo, dedica tu tiempo libre a algo que te motive.
¡Advertencia! El punto de vista de este artículo es totalmente personal. Solo vengo a mencionaros lo importante que es cultivarse de diferentes formas. Os animo a no perder la motivación por mejorar, por aprender, por vivir. En el Máster de la vida te enseñan idiomas, empatía, supervivencia, cultura, educación, esfuerzo y motivación y, además, contiene una parte práctica de 30 créditos para poder llevar a cabo y mejorar tus habilidades de adaptación a diferentes medios. No lo dudéis y matricularos cuanto antes.
Por Alba Villarig