¿Qué son los hábitos? Un hábito es una conducta que se realiza de forma repetida y que se convierte en un acto automático después de un tiempo. Tu vida entera, tus rutinas, forman parte de una serie de hábitos que has construido durante el tiempo que llevas en este mundo. Hábitos que dictan qué haces y qué vas a hacer en tu día a día. Crear hábitos nuevos o cambiar hábitos ya existentes no es fácil, pero sí posible.
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Hábitos positivos y negativos, ¿en qué consisten?
Hay hábitos positivos que sería bueno que incorporaramos a nuestra vida. como acostarse a dormir a la misma hora todos los días. También hay hábitos negativos que ya tenemos y que nos gustaría cambiar, como podría ser dejar de fumar. El proceso de crear hábitos positivos y cambiar hábitos negativos es el mismo. Para los atletas que están leyendo esto, hábitos positivos como una buena nutrición o una actitud positiva en momentos difíciles son clave en tu rendimiento. Entre más hábitos de este tipo puedas implementar en tu dia a dia, más puedes ayudarte a ti mismo a superar tus metas.
Un autor americano de nombre James Clear ha dedicado su vida a la ciencia de crear y cambiar hábitos. En su modelo, todos los hábitos pasan por cuatro etapas: señal, antojo, respuesta y por último, recompensa. Primero la señal, que puede ser un ruido, un olor o un sentimiento. Esa señal crea un antojo en tu mente y te motiva a responder. Tu respuesta te da la recompensa que satisface tu antojo. Entonces, tu mente asocia que cuando recibes esa señal, vas a recibir una recompensa.
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4 reglas para crear o cambiar hábitos
Para crear un hábito nuevo se utilizan las cuatro etapas del modelo para transformar una acción en un hábitomautomático. Estas cuatro etapas se transforman en cuatro reglas:
- Hacerlo visible
- Hacerlo deseable
- Hacerlo fácil
- Hacerlo satisfactorio
Para cambiar o romper hábitos entonces, las leyes cambian a lo opuesto, aunque la idea sigue siendo la misma.
- Hacerlo invisible
- Hacerlo indeseable
- Hacerlo difícil
- Hacerlo poco satisfactorio
Por ejemplo; imagina que estás caminando por el centro de Madrid y sientes un olor a chocolate (señal). Eso te da ganas de tomarte uno (antojo) y decides entrar a comprar un chocolate (respuesta) y te lo tomas. Con ello satisfaces tu antojo (recompensa) y tu mente crea una asociación entre el centro de Madrid y el olor del chocolate. Si este proceso se repite varias veces, se convierte en un hábito. Por lo cual, cada vez que estés en el centro de Madrid, te va a dar antojo de tomarte un chocolate. Esto crea un ciclo de señal a recompensa, en el que entre mejor sea esta última, más fácil es que el ciclo se complete y sigas recibiendo la señal en el futuro, y por tanto, a actuar en consecuencia. Normalmente, este procedimiento pasa inconscentemente, pero puedes tomar la iniciativa de hacerlo a propósito de forma positiva.
La clave para crear o cambiar un hábito está basado en esas cuatro simples reglas. Cuando te preguntas porqué no puedes crear una rutina buena para dormir a una hora adecuada, o para levantarte del sofá a hacer ejercicio, la respuesta más común es que estás fallando en una de las cuatro reglas de crear hábitos. A lo mejor, la señal no es bastante fuerte para crear un antojo, o tu antojo no lo es para motivarte a responder. También puede ser que tu respuesta no sea adecuada para ganar una recompensa, o la recompensa no es lo bastante satisfactoria para volver a comenzar el ciclo.
Y hasta aquí, si tienes ganas de crear un hábito, te doy un plan de ataque para que tengas todas las herramientas a tu disponibilidad para triunfar.